30 enero 2017

¿Confias en vos mismo?



Para muchos, el trabajo es una fuente de autoestima y confianza que ayuda, a que las personas se sientan valiosas y útiles. Esta fuente de autoestima desaparece cuando estamos desempleados y a medida van pasando los días pueden verse incrementados los sentimientos de culpabilidad e insatisfacción.

Si a ello, le sumamos un posible rechazo durante un proceso de selección, podemos llegar a pensar que no somos lo bastante buenos y que con la que está cayendo, jamás vamos a conseguir lo que nos proponemos.

Existen casos, en los que una persona se siente tan identificada con su trabajo, que al perderlo, parece perder también parte de su identidad. Porque dicha identidad, la estaba definiendo en gran parte, en función de su trabajo. En este sentido, es importante recordarnos a nosotros mismos, que “no somos nuestro trabajo” y que por tanto, cuando nos rechazan en un proceso de selección, no nos están rechazando a nosotros como personas sino que están optando, por otro candidato con unas aptitudes/ experiencia distintas a la nuestra.
En esta línea, cuidar nuestra autoestima es algo esencial no solamente porque nuestra representación interna va a condicionar nuestro comportamiento sino también, porque vamos a estar más preparados para conseguir un nuevo puesto de trabajo.
Dicen, que desde el principio de los tiempos, las emociones, han hecho más daño a las personas y a la sociedad que todas las plagas de la historia.
También se ha dicho durante muchos años que “el trabajo dignifica” creencia, que si bien ya hace tiempo que empezó a cuestionarse, todavía ejerce su poder y sigue haciendo cierta mella en nuestra sociedad.
Desde nuestra experiencia en procesos de coaching de transición profesional, las personas que carecen de confianza en si mismas, tienden a infravalorarse constantemente, no creen en sus capacidades ni en sus posibilidades y eso, las hace perder muchas oportunidades laborales cuando a día de hoy, las oportunidades escasean y han de aprovecharse.
En este contexto y grandes rasgos, son múltiples los factores que contribuyen a incrementar nuestra autoestima no obstante, hemos considerado oportuno destacar 9 de ellos:
1. Realizar un trabajo personal de auto-cocimiento y adquirir la noción de nuestras cualidades y características así como de nuestras limitaciones y defectos. Profundizar en aquello que nos mueve, en aquello que nos hace levantar de la cama con ilusión, profundizar en uno mismo, en los valores, recursos, talentos y limitaciones. Tomar una mayor consciencia de todo ello, se erige como la base de nuestra autoestima y el punto de partida ideal para empezar a construirla o bien reconstruirla y dejar de culpabilizarnos o mostrar una constante insatisfacción con todo lo que nos rodea.
2. Cuidar nuestras relaciones personales y el ambiente por el que nos movemos:Como decía Mark Twain “Mantente a distancia de aquellos que intentan disminuir tus ambiciones, la gente pequeña siempre hace eso, los realmente grandes, te hacen creer que tu también puedes” En definitiva, aléjate de los pesimistas, conformistas y cenizos que insisten en que veas la vida desde dónde la ven ellos. Busca personas que te carguen de energía, que sean emprendedoras, que vean el baso medio lleno en lugar de medio vacío, que vivan la vida con la ilusión de llegar a conseguir todo aquello que se propongan.
3. Buscar casos de éxito y aprender de los mejores: ver que otros han podido hacer aquello que tú deseas, va a animarte a intentarlo y perseverar en conseguir tu meta. Si a ello le sumamos la lectura de temáticas inspiradoras que alienten, respalden y potencien tu camino, todo ello contribuirá a que mantengas tu energía y no caigas en el negativismo y la falta de motivación.
4. Haz un listado de tus éxitos y tus logros: párate a pensar en todo aquello que has conseguido a lo largo de tu trayectoria profesional y también vital. Piensa también en los obstáculos que has logrado superar y en aquellas habilidades que has necesitado usar para conseguirlo. Toma consciencia de todo lo que has hecho, en lugar de centrar tu atención en lo que no has hecho y todavía tienes por hacer.
5. Cambia el ¿Cómo lo haré? por el ¿Para qué lo voy a hacer?: cuando uno empieza a entrar en las espirales interminables del ¿Cómo? ¿Cómo? ¿Cómo? tiende a paralizarse, porque son tantos los elementos que ha de tener en cuenta y controlar que se siente abrumado. No obstante, si lo que hacemos es cambiar este ¿Cómo? por el ¿Para qué? Salimos del bloqueo y centramos nuestra atención en nuestra finalidad, factor que en lugar de abrumarnos nos empuja a seguir adelante. (Por ejemplo, si me estoy planteando cambiar mi trayectoria profesional y empiezo a reflexionar sobre¿cómo lo voy a hacer? uno puede agobiarse mucho por falta de respuestas no obstante, si uno se centra en ¿para qué lo voy a hacer? ejemplo: para ser feliz, es una manera de enfocarlo más enérgica y movilizadora a la acción.)
6. Cuida tu salud y tu imagen: haz ejercicio físico, come bien, descansa, ¡ponte guapo o guapa! siéntete bien contigo mismo porque de este modo, te sentirás también con una mayor confianza y ello, cambiará tu actitud mostrándote, más abierto, sociable, simpático, expresivo y cercano en las entrevistas de trabajo.
7. Sé tu mismo y sé auténtico: las personas que se sienten bien consigo mismas, disponen de más recursos para superar retos. Ser uno mismo, expresar lo que uno piensa y necesita, va a propiciar un discurso más fluido, rico y coherente con el entrevistador. En este punto, cabe destacar, que el conocimiento que la persona tenga sobre si misma, va a ayudar a incrementar dicha autenticidad y confianza.
8. Controla tus pensamientos negativos: presta atención al modo en qué te hablas a ti mismo y el tono que usas para hacerlo pues muchas veces, sin darnos cuenta, tendemos a machacarnos con frases tipo “eres tonto” “pareces idiota” “ no lo conseguirás” “ no eres suficientemente bueno” “no te lo mereces” etc. Quizás pueda parecer algo poco importante, pero los pensamientos generan emociones que nuestro cuerpo experimenta de forma negativa debilitándose ¿Cómo sería si en lugar de centrarnos en lo que no tenemos o no somos centrásemos nuestro pensamiento en lo que somos y en aquello que tenemos?
9. Aprende a diferenciar entre aquellos obstáculos que están dentro de tu área de influencia de aquellos, que están fuera: es importante que inviertas la energía donde toca, me explico, es importante que cuando pienses en los obstáculos con los que te encuentras en el proceso de búsqueda de empleo, los listes y diferencies entre: aquellos sobre los que puedes hacer algo vs aquellos sobre los que no puedes hacer nada (Por ejemplo: que estemos en crisis es una realidad sobre la que poca cosa puedes hacer; no obstante, no saber inglés es un obstáculo sobre el cual, puedes actuar apuntándote a hacer clases) La finalidad de este aspecto, es que te centres en aquello que puedes solucionar, en lugar de centrarte y poner tu energía en aquello que no depende de ti.
¿Y a ti? ¿Te gustaría sentir una mayor confianza en ti mismo?

Seguinos en Facebook, dale ME GUSTA a nuestra fan page para enterarte antes que nadie de los nuevos avisos laborales y compartirlos con tus amigos, además encontrarás las mejores herramientas y consejos para mejorar tu búsqueda. CLICK AQUI

*** Nota extraída de Mundo tolk!, la comunidad más exitosa sobre búsqueda laboral ***
¡No olvides compartir ↓↓↓ dale click al icono de tus Redes Sociales, ayudá a tus amigos!